Bocaditos de Cielo

Hola!

Hoy les traigo una receta simplemente deliciosa y además, fácil de conquistar a cualquiera. 
La he llamado Bocaditos de cielo, porque la receta original tiene un nombre simple, Panecitos azucarados. Y bueno, cuando los comí por primera vez me parecieron algo increíblemente buenos, y se me ocurrió llamarlos así. 
Hay muchas recetas de las que no sé el verdadero nombre o el origen, así que las adopto y les pongo nombre, jejejeje. 
Lo que me encanta de los Bocaditos, es que tienen ese sabor a mantequilla y vainilla, que hacen que todo se transforme a un sabor que te envuelve. Los pueden comer de postre, o de merienda con una taza de té, con helado, más fácil aún, solos son algo peligroso porque están de vicio.
Vamos a por la receta y así puedan disfrutar de una verdadera delicia.



                             Bocaditos de Cielo

Ingredientes:

(para 8 bocaditos)

* 400 gr de harina para repostería

* 100 ml de nata espesa 

* 1 huevo

* 1 vaina de vainilla

* 120 gr de mantequilla fría

* 70 gr de azúcar blanca 

* 1 1/2 cucharaditas de levadura en polvo

* 1/2 cucharadita de sal

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* 1 huevo batido

* Azúcar moreno para espolvorear

Proceso.

Primero ponemos todos los ingredientes a mano. Luego en un bol ponemos la nata espesa y añadimos las semillas de la vaina de vainilla y removemos hasta integrar.

                                                 

Reservamos mientras hacemos el resto del proceso y así la nata va cogiendo todo el sabor de la vainilla. En otro bol más grande, ponemos la harina junto con la sal, el azúcar blanca y la levadura en polvo. 

Mezclamos para que se integre todo y luego echamos la mantequilla fría cortada en cuadritos. Les recomiendo que la mantequilla la saquen de la nevera para añadirla directamente y no vaya perdiendo frío.

                                           

La vamos a integrar con las manos juntos con la harina hasta conseguir una especie de mezcla arenosa.

Después en la mezcla de la nata y la vainilla, vamos a añadir el huevo entero.

                                                

Batimos con una espátula hasta incorporar totalmente el huevo con los ingredientes anteriores.

Añadimos la mezcla de los líquidos (nata, vainilla y huevo) a la de los sólidos (harina azúcar, mantequilla, etc).

                                                 

Batimos a velocidad suave durante medio minuto aproximadamente. Después vaciamos la mezcla a una superficie enharinada y formamos una especie de cuadro, de 1,5 cm de grosor.

                                            

Hacemos dos cortes para obtener cuatro trozos, luego cada cuadrado en dos, haciendo forma en triángulos, hasta conseguir 8 trozos.

                                            

Los colocamos en una bandeja de horno con papel vegetal, dejando espacios para que a la hora de hornearlos no se peguen. Luego los untamos con el huevo batido y espolvoreamos con azúcar moreno.

                                           

Con el horno precalentado, horneamos durante 20 minutos a 190ºC. Depende de cada horno.

Pasado el tiempo de horneado, comprobamos con un palillo y sacamos. 

                                              

Dejamos templar y podemos comerlos calientes con helado de vainilla o fríos con yogur natural y mermeladas o siropes. 

                                          

Yo los disfruté con yogur griego natural y compota de manzana, uuuuffff...

                                  ...simplemente espectacular.